“Los otros Duarte”- Crítica

Por Nadia Sotelo

Todos los sábados a las 19:30, el Teatro del Pueblo (Lavalle 3636, CABA) presenta un espectáculo increíble llamado “Los otros Duarte”. La dramaturgia es de Gastón Quiroga y en la dirección está Marcelo Velázquez, las actuaciones que revisten carácter de majestuosas son interpretadas por José Manuel Espeche, Guillermo Flores y Cecilia Sgariglia. Dura aproximadamente 70 minutos y valen cada uno de los segundos en que los espectadores se encuentran en sus butacas.

Los otros Duarte cuenta la historia de los medios hermanos de Eva Duarte de Perón, que la desprecian y establecen diálogos de mucha envidia, bronca y resentimiento, para quién fuera la mujer de uno de los políticos más importantes de la Argentina. Sin embargo, el principal argumento de los Duarte, tiene que ver con su padre y la descendencia de medios hermanos que nunca fueron aceptados por los hijos que se caracterizaron por ser los primeros Duarte.

Chacha (Cecilia Sgariglia) odia a su media hermana, tanto es así que observa todos los movimientos que Evita realiza en su vida. Pero no lo hace con el motivo de estar en contacto con ella, sino para despreciarla y destilar rumores que pueden no ser ciertos, pero que la dejan en paz, al recordar según sus palabras “que es una bastarda” y, de hecho, se llega a insinuar que no es hija de su padre. Pero su postura no era compartida por sus hermanos, quienes tenían un poco de estima de quien fuera la primera Dama de la Nación.

Chichilo (Guillermo Flores) y Cholo (José Manuel Espeche) aunque fueron los hermanos de Chacha, no mostraban envidia por Evita. No obstante, tampoco vivían una vida tranquila y feliz, sino repleta de inconvenientes y problemas. Chichilo no podía tener pareja estable y Cholo, desaparecía y volvía, por situaciones relacionadas al ámbito político.

Aunque presenta una trama, un tanto triste, porque la felicidad no abunda en sus vidas y todo el tiempo tienen que reconocerse como los primeros Duarte, excluyendo a los otros hijos que procreó su padre, es sumamente cómica. Los actores son brillantes, el texto es impecable y la relación entre política e historia, se encuentra muy bien establecida e interpretada.

El final es muy emotivo y desnuda el pensamiento de lo que es ser familia. ¿los pleitos familiares deben ser para siempre? ¿Cómo se puede juzgar a alguien sin conocerlo? ¿los medios hermanos no pueden establecer sentimientos de hermandad? ¿el odio y el desprecio no se pueden curar? ¿es relevante preguntarse quién es realmente un Duarte legítimo?

Los otros Duarte, los que nacieron primero y que detentaron ser los auténticos, han sido olvidados por la historia y quien fuera el desprecio de la familia, es la única recordada y amada por multitudes. Esta obra es muy interesante, porque deja ver cómo el ser humano siempre quiere ser más importante que otro, sobresalir, pero a veces esto puede resultar todo lo contrario. Sin embargo, evidencia que no todos buscan trascender, que algunos se arrepienten por no haber tenido vínculo con otros de su sangre, por peleas absurdas y que el tiempo pasa y no hay vuelta atrás. La recomiendo!!!

Funciones:

Sábados a las 19:30 hs

Teatro del Pueblo (Lavalle 3636, CABA)

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FICHA TÉCNICO ARTÍSTICA:

Dramaturgia: Gastón Quiroga

Actúan: José Manuel Espeche, Guillermo Flores, Cecilia Sgariglia

Diseño de vestuario: Paula Molina

Diseño y realización de escenografía: Ariel Vaccaro

Música original: Matías Macri

Diseño De Iluminación: Alejandro Le Roux

Fotografía: Florencia Laval, Lucas Suryano

Asistencia de dirección: Emanuel Gómez

Prensa: Kasspress

Producción ejecutiva: Cristina Sisca

Dirección: Marcelo Velázquez

Autor: Nadia Sotelo

Soy estudiante de comunicación social. Escribo crónicas, hago críticas de teatro, amo la música y a Chespirito. Me gusta escribir sobre famosos, programas de televisión y temáticas sociales.

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